Ahora les toca a los más pequeños de la casa volver al colegio. Nos podemos imaginar lo mucho que les cuesta el poner fin a sus vacaciones pensando en lo que a nosotros nos supuso incorporarnos a nuestro puesto de trabajo. A ellos les pasa lo mismo, se imaginan que ya no volverán a la playa, al campamento, acostarse más tarde y no necesitar de madrugar, jugar más con los amigos, los deberes y de nuevo los exámenes y horas y horas de estudio….

Los padres que ya han tenido otros hijos escolarizados, o su hijo ya ha superado los primeros años seguro que les resulta más sencillo el dejarlos en el colegio.

Si es el primer año que su hijo se escolariza le aconsejo que siga las indicaciones de los profesores que van a enseñar a su hijo. Confíe en la experiencia que han desarrollado a lo largo de los años y permanezca tranquilo para transmitirles a sus hijos más pequeños que los van a dejar en un buen lugar.

Introduzca la idea de ir al colegio relacionándola con actividades que le resultan al niño atractivas: jugar, pintar, estar con otros niños. Haga que el niño se entusiasme con esas ideas. Manifieste usted ese entusiasmo también y verá como hace partícipe de él a su hijo.

Si los niños ya son más mayores háblele de las cosas positivas que le esperan con la vuelta al colegio, el encontrarse de nuevo con los compañeros que durante el verano no pudieron ver y que tan bien les caen y que de nuevo van a poder participar de muchas actividades juntos.

Motívelo a trabajar, diciéndole que cuantos mejores resultados consiga su profesor más lo va a estimar.

Si acaso su hijo manifiesta emociones de tristeza, nerviosismo, irritación, pregúntele que le sucede, a que teme, permítale expresarse y si alguna idea tiene mal asentada ayúdele a cambiar su interpretación y a relacionar la vuelta y estancia en el colegio con buenas emociones. Si es necesario un profesional puede ayudar a su hijo a relacionar esta etapa de su vida con cosas positivas y muy importantes para su futuro.

Motívelo con el material nuevo escolar, deje que escoja la mochila, el estuche, las carpetas, que se ilusione con ese material que le ha gustado y que sea el mismo quién colabore en todo lo que sea posible y así también se vaya responsabilizando de sus cosas y aprendiendo como se hace y con ello ayudarle a madurar.

A partir del primer día, vamos a explicarles la importancia de la buena organización desde el principio, de llevar las materias al día, de planificar bien los horarios de estudio, priorizar las materias que requieran más tiempo, organizar el material para mañana. Esto les va a permitir sentirse bien y seguros de sí mismos, generando unos buenos hábitos de estudio y con la sensación de que llevan todo al día sin necesidad de angustiarse y luego en el último momento forzar y hacer mal las cosas y no conseguir los buenos resultados que podrían haber logrado.

Recuerde siempre la importancia de tener una buena zona de estudio en la casa. Es necesario que el niño igual que en el colegio tenga este espacio con todo el material necesario y bien acondicionado. El niño necesita del silencio y la buena iluminación para concentrarse. En esta zona puede tener un horario de estudio y organización de actividades y tareas para toda la semana y así ya ir dedicando el tiempo necesario a cada una para evitar luego sorpresas de última hora, donde nos pudimos haber olvidado de algo importante: elaborar un trabajo que teníamos que entregar, la fecha de un examen, de esta manera ya está en la programación del horario y vamos poco a poco cumpliendo los objetivos.

Transmítale la importancia de que es necesario que ese tiempo de estudio no lo pierda despistándose con cosas que lo desconcentren. Anímelo a que cada cierto tiempo se levante coma una fruta o la merienda se mueva un poco y vuelva para la zona de estudio. Si lo hace así verá como todos los días le queda un rato para el ocio, el deporte, los amigos, la televisión, la familia….

Déjeles participar con algún detalle en la decoración de ese espacio de estudio, personalizándolo con algo que les guste en especial (un poster, fotografía…)

Para motivar a los más mayores con esas materias que se les resisten y les cuesta estudiar, hable con ellos y relaciónelas con lo que les gustaría ser de mayores. Explíqueles lo importante que es dedicarles tiempo y superarlas para poder llegar a tener la profesión que tanto les gusta.

Refuerce a sus hijos en sus avances y por su esfuerzo y dedicación al trabajo. Refuerzos verbales como estos los harán sentirse bien y capaces: “tu puedes, “ Te ha quedado muy bien el trabajo”, “ me gusta mucho, eres un campeón”,” segurísimo que te va a salir muy bien”…. Otro tipo de refuerzos que a veces los niños consiguen sin esfuerzo, condiciónemelos al esfuerzo de ellos, sin necesidad de comprar cosas muy especiales.

Organice bien las actividades extraescolares a las que va asistir su hijo. Respete en lo posible sus preferencias, necesitamos que se sientan bien, los horarios que no sean exigentes, no los podemos saturar, también necesitan algún tiempo para descansar.

No olvide la importancia del deporte y los beneficios que reporta en el bienestar y rendimiento. Invite y anime a su hijo a practicar algún tipo de deporte, si puede ser al aire libre, siempre que el buen tiempo lo permita mejor.

Cuide la alimentación, intente que ingiera la cantidad necesaria de alimentos variados para tener una alimentación equilibrada. Priorice las verduras, frutas y alimentos sanos y naturales. No deje que su hijo se alimente mal, el rendimiento será menor.

Otro aspecto muy importante es el sueño, haga que duerma las horas necesarias para levantarse de buen humor y energía suficiente para afrontar cada día.

Mantenga una relación y comunicación buena con los profesores de su hijo. Participe en la medida que le sea posible de las actividades que se organicen en el colegio y disfrúteles cerca de su hijo. Hábleles a sus hijos siempre en positivo de su profesor y del colegio para que adquiera el respeto y cariño necesario hacía ellos.

Si su hijo presenta alguna dificultad para el estudio o algún problema emocional o de salud, solicite la ayuda de los profesionales y déjese asesorar para ayudar a su hijo lo antes posible.