Todas las madres nos desvivimos para dar a nuestros hijos la mejor calidad posible en los productos, alimentos o equipamiento que un bebe necesite.
Antes de su nacimiento organizamos con entusiamo y amor su ajuar, todo lo que nuestro hijo va a necesitar , selecionamos los colores dependiendo de su sexo.
A escoger su nombre vamos a dedicar tiempo y así con todos los detalles para que nada se nos pase por alto y no quedemos repesosas de que quizás lo pudiesemos haber hecho mejor.
En sí estas actividades nos llenan de alegría y entusiasmo esperando el momento de su llegada.
» La maternidad tiene un efecto humanizador. Todo se reduce a lo esencial.» Meryl Streep
Es lo ideal mantener las emociones estables, con tonalidades positivas que nos previenen de enfermedades y malestares psicológicos que en ningún momento es bueno el tener que sufrirlos, aunque si de alguna manera podemos evitar su impacto negativo por su repercusión en nuestras vidas, es cuando vamos a ser madres o ya lo somos de hijos pequeños evitando el que estos tengan que empaparse de tales malestares es primordial par su futura personalidad.
La manera en que la madre se sienta emocionalmente afecta tanto en la gestación como al futuro bebé en su desarrollo social, cognitivo y emocional.
Siempre aconsejo a las mujeres que asesoro que el mejor momento para empezar a prepararse para ser madres es antes de quedarse embarazada. Síantes, ya que nuestro entusiasmo y el deseo de la pareja por ser padres conforman el nido emocional adecuado para que la concepción se de.
» Los hijos no son los juguetes de los padres, ni la realización de su necesidades de vivir, ni sucedáneos de sus ambiciones. Los hijos son la obligación de formar seres dichosos» Simone de Beavoir
Ambos miembros deben cuidar su salud anímica y concebir en un baríorritmo alto, la música clásica ayuda a mantener esta estabilidad.
Los hijos del amor y del deseo ferviente por traerlos al mundo son afortunados ya que las primeras experiencias transmitidas por sus padres son estables. Serán bianavenidos y afortunados con la vida ya que su huella germinal así lo trasmite.
» No hay manera de ser una madre perfecta, hay un millón de maneras de ser una buena madre». Jill Churchill
Todo lo contrario sucederá cuando los hijos son fruto de emociones afligidas, estados psicológicos alterados y parejas poco unidas.
Es el momento ideal antes del embarazo de dedicar tiempo a una misma, de quererse más que nunca y permitirnos sentirnos bien a través de unos hábitos de vida saludables.
Si se nos resiste el embarazarnos, mantengamos la calma, sin obsesionarnos , sin renunciar al disfrute en pareja; viviéndolo con naturalidad para que esas emociones se transmitan cuando se de la concepción.
Ya embarazadas formamos una unidad única emocional con nuestro hijo dentro de nuestro vientre, nuestros estados emocionales van configurando su estructura psicológica y las bases de su personalidad. En este periodo la madre debe ir realizando esfuerzos acorde a la etapa de gestación en la que se encuentre evitando sufrir el cansancio o el estrés para no trasmitir estas incomodidades a su bebe. Atender y cubrir sus necesidades para realmente sentirse satisfecha y alimentar emocionalmente a su hijo. Permitirse el descanso y disfrutar de las cosas y ocios que la hagan sentir relajada y despreocupada. El apoyo sincero de la pareja es importante para que ella se sienta feliz y el padre haga de este modo vínculo seguro con su hijo a través de la madre.
» Tomar la decisión de tener un bebé es transcendental: significa decidir que desde ese momento tu corazón empezará también a caminar fuera de tu cuerpo». Elizabhet Stone
Nos vamos acercando al momento del alumbramiento y algunas emociones nos impiden el vivirlo con naturalidad, entre ellas el miedo que hace que los partos se prolonguen al impedir que el sistema nervioso parasimpático se active y las fibras circulares del útero se relajen y el bebe pueda ser expulsado. Cambiar estas interpretaciones y vivirlo con más confianza ayudará a que el momento sea breve, lo que siempre se desea.
Ya con nuestro hijo en los brazo nos disponemos a alimentarlo con lo mejor de nosotras: nuestra leche, estabilidad y disponibilidad emocional para que crezcan satisfechos y atendidos. Evitaremos con ello que el día de mañana sean personas insatisfechas y desatendidas que crean que externamente a ellos esta lo que necesitan para ser felices, al no haberlo recibido de su madre e indirectamente de su padre a través de ella en su infancia:” La estabilidad emocional”
Comentarios recientes